¿Tengo un apego dependiente? Descubre las señales desde la psicología

¿Qué es el apego dependiente?

El apego dependiente es una forma de vínculo emocional donde el miedo a perder a la otra persona se vuelve tan intenso que afecta al bienestar propio.

Se suele desarrollar por experiencias tempranas donde la figura de apego (padres, cuidadores…) no fue segura, estable o emocionalmente disponible.

Cinco señales de un estilo de apego inseguro y dependiente

1. Miedo excesivo al abandono o al rechazo

• Ansiedad constante ante la idea de que la pareja se aleje.

• Necesidad recurrente de validación.

• Interpretación de gestos neutros como señales negativas.

2. Dificultad para confiar plenamente

• Desconfianza ante la estabilidad del vínculo.

• Dudas frecuentes sobre si el otro te quiere.

• Conductas de control o necesidad de comprobar el afecto.

3. Tendencia al autosacrificio y a la complacencia excesiva

• Priorizar siempre al otro por encima de ti.

• Dificultad para poner límites.

• Miedo intenso a perder el cariño o aprobación de la pareja.

4. Altibajos emocionales intensos y desregulación

• Pasar de la euforia al miedo o la tristeza con facilidad.

• Reacciones impulsivas ante pequeñas señales de desapego.

• Necesidad de la pareja para sentirse regulado emocionalmente.

5. Idealización de la pareja

• Colocar a la pareja en un pedestal.

• Creer que sin esa persona no serías feliz o estarías perdido/a.

• Baja autoestima de base.

¿Qué hacer si te reconoces en este patrón?

Lo importante no es etiquetarte, sino entender que este estilo de apego se puede trabajar. La terapia es un espacio seguro donde reconstruir tu forma de relacionarte, fortalecer tu autoestima y aprender a vincularte desde un lugar más sano y libre de miedo.

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